Todo sobre el hormigón desactivado: qué es, cómo hacerlo y precio
Actualmente existen múltiples técnicas y materiales para construir pavimentos de toda índole en los exteriores de las viviendas particulares así como en suelos de uso público tales como aceras, parques y jardines. Entre todas las opciones que brinda un mercado en constante evolución e innovación, el hormigón desactivado conforma un gran reclamo por su estética atractiva, su elevada resistencia y durabilidad ante las condiciones más abruptas y, como no, por un coste asequible y económico en comparación con otras opciones.
El hormigón lavado u hormigón árido visto, como también se le denomina, es uno de los métodos más sencillos y eficaces para crear pavimentos in situ cuya apariencia se asemeja enormemente a la de la grava. Una rugosidad que brinda numerosas virtudes, entre las cuales se encuentra la textura antideslizante que otorga.
A continuación, vamos a profundizar en todo lo relacionado al hormigón desactivado. Explicaremos en qué consiste está técnica, sus principales beneficios, cómo hacerla correctamente, qué productos comprar para ejecutar este pavimento, así como cuál es su precio por metro cuadrado, entre otras muchas cuestiones.
¿Qué es el hormigón desactivado?
El hormigón desactivado es un tipo de hormigón que se caracteriza por ser una solera en la que los materiales áridos quedan expuestos parcialmente después de ser sometidos a un tratamiento especial. De esta manera, los áridos del hormigón sobresalen de la superficie siendo perceptibles a simple vista gracias al uso de un retardante del fraguado del hormigón llamado desactivante o desactivador. De ahí que se le conozca también con los nombres de hormigón lavado o árido visto. Estos nombres hacen referencia a que el hormigón queda al desnudo.
Cemento, agua y gránulos de piedra componen el hormigón árido visto que, en función del tipo de piedra y color que se escoja en su formulación, ofrecerá un tipo de acabado decorativo u otro. Dicha rugosidad que dota la piedra es la que desencadena en su textura antideslizante y de elevada resistencia frente a la acción de los agentes externos y condiciones climatológicas.
Ventajas y propiedades más destacadas del hormigón desactivado
Las superficies lisas, comunes y aburridas desaparecen dando paso a pavimentos originales y hermosos en los que el hormigón adopta la forma de árido decorativo. Una apariencia prácticamente idéntica a una pieza de granito o mármol. Esta técnica decorativa de la que nace el hormigón desactivado se remonta a principios del siglo XX, mucho antes de la irrupción de otro tipo de hormigón muy popular para exteriores como es el caso del hormigón impreso. No obstante, a pesar del paso de los años, no está en absoluto anticuado, sino que muchos profesionales sacan lo mejor de ellos mismos para crear auténticas piezas de arte. Una creatividad con la que los profesionales están llevando a este acabado a otro nivel.
El hormigón árido visto se clasifica dentro de los pavimentos decorativos. Una categorización a la que pertenecen otros sistemas como el hormigón impreso o el hormigón pulido. En el caso de exteriores, el hormigón lavado supone una de las alternativas más polivalentes y de garantía.
Su resistencia mecánica y química superior hacen del hormigón lavado una solución perfecta para cualquier ubicación geográfica ya que tolera los cambios bruscos de temperatura, viento, lluvia, sol, tránsito peatonal y rodado, etc. Por esto, los suelos con este acabado son idóneos para aquellos lugares que sufren de alta humedad, ciclos frío-calor y nevadas. Para ayudarte a elegir si este es el material adecuado para tu proyecto, lee detenidamente las principales ventajas que atesora el hormigón desactivado.
Se ejecuta rápidamente sin apenas disposición de equipos. En 24 horas se termina de secar, por lo que puede disfrutarse en un periodo de tiempo potencialmente corto. Una aplicación muy sencilla que se traduce en un ahorro de tiempo y mano de obra.
Su coste por m2 es muy asequible.
La exposición solar no le afecta ni degrada.
El hormigón desactivado es un pavimento antideslizante.
Su apariencia granular lo hace único, ningún otro tipo de hormigón puede recrear dicha estética.
Al hormigón árido visto se le aplica un desactivador que retrasa el fraguado del hormigón y que permite la irrupción de los áridos en la superficie.
Es un acabado decorativo muy versátil que se adapta a la perfección a cualquier ambiente. Esto se debe a las diferentes piedras y colores disponibles, que permiten adaptar este material a cualquier entorno.
Exento de tóxicos. El químico que se agrega para que sobresalgan los áridos del hormigón lavado no provoca efectos adversos ni a las personas ni al medioambiente.
Es un suelo de larga vida útil. La rugosidad de su acabado y su resistencia intrínsecas, mayor que la del hormigón convencional, permiten que este material disfrute de un estado inmejorable durante años. Un acabado de calidad intacta por mucho tiempo.
El hormigón desactivado posee una alta resistencia. Unas prestaciones mecánicas y químicas que vienen dadas por su rugosidad y porosidad y que le convierten en intocable ante los rayos solares, la lluvia, el tránsito peatonal y rodado así como frente a los agentes químicos.
De fácil y escaso mantenimiento. A diferencia de otros tipos como el pulido, el hormigón árido visto no requiere de un proceso de mantenimiento constante.
Principales utilidades y campos de aplicación del hormigón lavado
El hormigón lavado u hormigón árido visto destaca por posibilitar una gran diversidad de aplicaciones y utilidades. Esto se debe a su gran capacidad de adaptarse a diferentes entornos y a la versatilidad de un pavimento que propone una infinidad de texturas y colores.
Gracias a sus propiedades antideslizantes es una solución fantástica para llevar a cabo diferentes construcciones viales. Por ello, se emplea con frecuencia para pavimentar aceras, calzadas, calles, centros comerciales, terrazas, estacionamientos y gasolineras. Su llamativa estética que viene dada por los áridos vistos, hacen de este tipo de hormigón un sistema decorativo muy demandado en caminos de acceso a urbanizaciones que aportan un toque de exclusividad que muy pocos materiales son capaces de concebir.
Además de estos campos de aplicación, el hormigón lavado u hormigón desactivado es perfecto para crear pasos peatonales, cascos antiguos, zonas de tradición arquitectónica, áreas deportivas, rampas, plazas públicas, parques y jardines. Sea cual sea la utilidad que se le dé, este pavimento ofrece diseños muy originales y con personalidad a raudales. Un acabado pulcro donde la belleza y la resistencia se fusionan para satisfacer las necesidades de los clientes más exigentes.
¿Cómo hacer hormigón desactivado? Método explicado paso a paso
A pesar de que los componentes son similares a los hormigones convencionales, el método de aplicación dista bastante. Esto se debe porque para hacer hormigón desactivado se ha de emplear un desactivante o desactivador sobre el hormigón fresco. Un producto cuya funcionalidad es ralentizar el fraguado del hormigón.
A continuación, se procedería a realizar un proceso de lavado sobre el pavimento para que las piedras áridas seleccionadas sean meridianamente visibles sobre la superficie. Como resultado, obtendríamos un acabado exclusivo de propiedades ornamentales y antideslizantes muy bien valoradas. Elegancia y resistencia a cada paso. Procedemos a explicar cómo realizar este pavimento paso a paso.
1. Nivelar y compactar el pavimento
Es fundamental garantizar que el terreno esté en buenas condiciones. Para ello lo primero es asegurarse que esté bien nivelado y compactado antes de vertir el hormigón. A continuación se deberá proceder a replantar el terreno, lo cual permitirá comprobar si los niveles son correctos para evitar futuros desperfectos.
2: Delimitar la superficie de trabajo
Marcar muy bien los límites de la superficie que abarcará la superficie del futuro pavimento de hormigón desactivado. Este paso es súper importante ya que el hormigón líquido cuando todavía no está seco es muy moldeable. Si no se delimita la superficie al echar el hormigón se podrían producir derrames indeseados que significarían un método de instalación fallido.
3. Echar el hormigón sobre la superficie
Extender el hormigón de manera uniforme y homogénea a lo largo y ancho de la superficie. Para hacerlo de este modo se recurre a una herramienta llamada "regla" que facilita la correcta nivelación del hormigón por todo el perímetro. Es decir, se alisa de manera manual.
Importante: el tipo y cantidad de cemento incluidos en la formulación del hormigón repercutirán de manera proporcional en el fraguado de este último.
Tip de profesional: aconsejamos aplicar fibras sintéticas monofilamento para ayudar a la cohesión del hormigón. Las fibras facilitarán la posterior aplicación del desactivador de hormigón.
4. Fratasado del hormigón
Después, sería el turno de realizar el fratasado del hormigón con la ayuda de una fratasadora o helicóptero. Este paso contribuirá a la rugosidad final y la textura antideslizante del pavimento.
5. Aplicar un desactivante de hormigón
Para ralentizar el proceso de fraguado del material, se tiene que aplicar un desactivante superficial positivo aproximadamente 30 minutos después de echar el hormigón. Mientras la capa externa se seca lentamente, el resto de capas prosiguen el proceso habitual. Así, la capa externa termina erosionando y haciendo visibles los áridos que dan nombre al hormigón árido visto. Es muy importante seguir las indicaciones en materia de proporciones que cada fabricante especifica en las fichas técnicas.
Tip de profesional: utilizar el desactivador de hormigónde la familia Naturcem®.Pulverizar de manera uniforme a 2/4 bares con una boquilla de 0,79 mm de diámetro.
6. Lavar la superficie para exponer los áridos
Cuando el hormigón haya completado su proceso de secado y endurecimiento, habrá que lavar la superficie con agua a presión para eliminar los restos de mortero no fraguado y que los áridos reluzcan en la superficie. Este lavado se realizará entre las 3 y las 24 horas posteriores a la aplicación de nuestro Naturcem®. Hacerlo con una máquina hidrolimpiadora entre 100 y 150 bares.
Importante: si el producto está expuesto a sol fuerte y viento, o si la temperatura es inferior a los 30ºC, la limpieza deberá realizarse entre las 4 y las 12 horas siguientes. Si en cambio la temperatura excede los 30ºC, acortar el tiempo a las 3-8h posteriores.
7. Sellar el hormigón desactivado
Aunque el sellado no es estrictamente obligatorio, nosotros como profesionales recomendamos aplicar una resina especial como las de la familia Sealcem® para finalizar el proceso. Esta resina de uso opcional otorgará brillo al pavimento de hormigón desactivado. El resultado es sencillamente espectacular.
¿Qué desactivador utilizar para un pavimento de hormigón árido visto?
En la gama Naturcem® encontramos tres tipos de desactivadores para hacer pavimentos de hormigón árido visto. No hay uno que sea mejor que otro. La diferencia entre ellos reside en el color, en el grado de ataque y en el tamaño del agregado:
Naturcem® Low: de color azul, con un grado de ataque de 2 y un tamaño de agregado de 5-8.
Naturcem® Medium: rosa es su color, 4 su grado de ataque y 10-14 su tamaño de agregado.
Naturcem® High: de aspecto amarillo, un grado de ataque de 5 y con un agregado de tamaño 14-18.
Los tres son desactivantes exentos de disolventes, lo cual facilita enormemente su uso. En cuanto a su rendimiento es de 5 - 6 m²/L y garantizan un secado al tacto de 1-2 horas.
Recomendaciones sobre el mantenimiento del hormigón desactivado
A pesar de que el hormigón desactivado es un material que prácticamente no necesita mantenimiento, debido a su porosidad y rugosidad, hay una serie de productos que podemos utilizar para prolongar la vida útil y la lustrosidad del acabado.
Selladores para mantener a raya la suciedad y grasa
La grasa y la suciedad pueden convertirse en los grandes enemigos de un pavimento poroso y de textura rugosa, dos características que aúna el hormigón desactivado. Esto es debido a que pueden penetrar con extrema facilidad.
Para evitar esta causística, recomendamos utilizar selladores que tapen y sellen los microporos existentes en el pavimento. Con este producto dotaremos a la superficie de una protección más prolongada den el tiempo de la capa externa del hormigón frente a estos agentes, lo cual facilitará su limpieza al mismo tiempo. Asimismo, gracias al sellador se asegurará que los áridos no se deformen y se mantengan intactos.
Tip de profesional: usar un sellador que no amarille por estar expuesto a la acción solar, que proteja frente la grasa y el aceite y potencie el color del hormigón desactivado. Tienes un amplio abanico donde elegir en la familia de barnices y selladores Sealcem®.
Resinas para un hormigón desactivado reluciente
Mayor protección y un brillo imperecedero para acabados lustrosos e inolvidables. Eso conseguirás si utilizas resinas como Sealcem® que favorezcan a la permanencia de los áridos. Un resultado casi imperecedero y elegante.
Limpiadores específicos
Limpiar con agua a presión el hormigón desactivado es correcto, pero utilizar para ello productos diseñados específicamente para dicho fin es un plus. Multiplica la longevidad de tu pavimento de hormigón desactivado con el uso frecuente de limpiadores eficaces como los de la carta de Ecoclean.
Potencia el color del hormigón desactivado
El hormigón desactivado es muy duradero, pero no infranqueable. Con el paso del tiempo, de condiciones climatológicas más abruptas y adversas, fruto del cambio climático y de un tránsito rodado elevado, el color puede ir perdiendo parte de su esencia y apagarse. Una situación que puede remediarse con la aplicación de un potenciador de color como nuestro Sealcem® DSV Colour .Una pintura que no sólo revitalizará el color del pavimento de hormigón árido visto, sino que lo convertirá más resistente frente impactos y abrasiones.
Cómo reparar el hormigón lavado como un auténtico pro
Los acabados decorativos no están sólo para contemplarlos y admirar su belleza, sino también para usarlos. Para pisar el pavimento sin miedo e, incluso, pasar y aparcar vehículos encima. Un tráfico demasiado intenso o un temporal inaudito puede ocasionar pequeños desperfectos que tengan que ser subsanados. Te explicamos cómo reparar el hormigón lavado como si fueras un experto en la materia.
1. Preparar y limpiar el pavimento
Limpiar las grietas, agujeros o abolladuras que puedan haber en el pavimento. Barrer e incluso usar una hidrolavadora y un cepillo que nos ayude a erradicar el exceso que pueda haber de residuos. El fin es favorecer una superficie lo más lisa posible para que el nuevo hormigón que vamos a echar pueda adherirse sin problemas.
2. Mezclar los áridos con el hormigón
Elegir el tipo de árido que más nos guste y mezclar con el hormigón siguiendo a rajatabla las instrucciones precisas de los fabricantes.
3. Aplicar una capa de adhesivo epoxi
Añadir una capa de adhesivo epoxi a la superficie para que el hormigón se adhiera correctamente y no se desprenda después de completar el proceso de secado. Cuando el epoxi esté ni demasiado seco ni demasiado húmedo, procederemos a añadir el parche.
4. Colocar el parche sobre el hormigón lavado
Rellenar las grietas, agujeros o abolladuras con la nueva mezcla reción realizada. Herramientas como una espátula pueden ser de tran utilidad para cerciorarse que todo el espacio esté perfectamente relleno del hormigón con áridos. A continuación, nivelar la superficie.
5. Esperar entre 24 y 48 horas a que el parche seque
Respetar, con paciencia, un periodo prudencial comprendido entre 24 y 48 horas a que el parche que hemos añadido esté totalemente seco.
6. Lavar la superficie
Limpiar de nuevo el pavimento de hormigón lavado para que los áridos queden expuestos.
7. Proteger el soporte con un sellador
Queremos que el parche dure y puedas disfrutar durante mucho tiempo de tu pavimento. Para ello, es muy importante aplicar un sellador que proteja el soporte y déjalo secar aproximadamente una semana para que adquiera sus máximas prestaciones.
¿Cuál es el precio del hormigón desactivado? Coste por metro cuadrado
Existen varios factores que determinan el coste por metro cuadrado del hormigón desactivado. El tipo de piedra y color seleccionados para mezclar con el hormigón, la mano de obra de la constructora, la zona geográfica en la que se ubique la obra así como el desactivante que vaya a ser utilizado para conseguir el popular acabado de hormigón árido visto. Teniendo en cuenta todos estos elementos es un material con una relación calidad-precio excelente, siendo bastante más asequible que otros materiales de construcción.
En líneas generales, aunque según dónde se mire podemos encontrar costes muy diferentes teniendo en cuenta los factores previamente descritos, el precio del hormigón desactivado por metro cuadrado oscila entre los 20 y los 60 euros.
Texturas del hormigón desactivado: infinitas texturas y colores
El hormigón desactivado constituye un pavimento continuo de aspecto rústico y terroso de texturas infinitas por sus áridos disponibles: canto rodados, marmolinas, gravas, etc. Indistintamente al árido elegido, el resultado siempre es el mismo: un pavimento liso, rugoso y antideslizante.
Para una mayor personalización se puede combinar el cemento con cualquier árido, granulometría y color. A gusto del consumidor. El catálogo no tiene fin, pudiendo jugar con diferentes motivos geométricos y materiales como la madera, la piedra o el ladrillo. Cualquier forma y textura puede ser proyectada con el hormigón desactivado, creando pavimentos muy dispares entre sí pero todos ellos en perfecta armonía y consonancia con el entorno que les rodea.
Tipos de áridos que puedes seleccionar
Algunos de los áridos que puedes mezclar con el hormigón para conseguir este acabado decorativo son:
- Piedra triturada
- Guijarros
- Granito descompuesto
- Rocas de sal
- Caliza
- Cuarcita o basaltos
Colores para tu hormigón desactivado
Los colores más habituales son, sin duda, el blanco, el gris, el marrón y el negro. Sin embargo, gracias a la personalización que permite el hormigón desactivado, puedes jugar con todo tipo de tonalidades e incluso combinar diferentes colores para crear un soporte mucho más especial. La ayuda de un profesional experimentado será decisiva para que puedas dar al pavimento un acabado único e intransferible para tu espacio exterior.
¿Hormigón desactivado u hormigón impreso? ¿Cuál elegir?
Son dos tipos de hormigón que precisan de una técnica decorativa especial para conseguir el acabado final del que presumen. Mientras el hormigón desactivado se caracteriza por dejar a la vista los áridos tras aplicar un desactivante, el hormigón impreso estampa sobre el pavimento moldes de diferentes formas que imitan la apariencia de otros materiales como la piedra, la madera o el ladrillo.
En resistencia ambos van sobrados, siendo pavimentos decorativos muy duraderos. Dos materiales muy agradecidos en cuanto a mantenimiento se refiere y con precios por metro cuadrado muy competitivos y asequibles. ¿Por cuál decantarte? La respuesta en sencilla. Depende del acabado que desees obtener, ya que no tienen nada que ver.
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